Derivada
La derivada y la recta tangente a una curva
En la primera mitad del siglo XVII no se conocían métodos generales para calcular la tangente a una curva en un punto de la misma. Este problema se presentaba con frecuencia en mecánica, en óptica y en geometría, y generalmente se resolvía, de forma geométrica, con técnicas adaptadas a cada caso particular. La dificultad está en que, siendo la tangente una recta, se precisa conocer dos puntos de la misma, o bien un punto y su pendiente, para poderla determinar.
Supongamos que queremos hallar la tangente a una curva de ecuación en el punto . La estrategia, usada primero por Pierre de Fermat y más tarde por Newton, consiste en aproximar la tangente por rectas secantes cuyas pendientes sí pueden calcularse directamente. En particular, consideremos la recta que une el punto con un punto cercano , de la gráfica de . Esta recta recibe el nombre de secante (recta que corta a la curva, pero no es tangente a la curva). La pendiente de esta secante es:
Dicho número suele llamarse cociente incremental de en .
Obsérvese que una secante es una buena aproximación de la tangente, siempre que el punto esté próximo a . Estas consideraciones llevan a definir la tangente a la gráfica de en el punto como la recta que pasa por dicho punto y cuya pendiente es igual al límite:
supuesto, claro está, que dicho límite exista.
Al límite anterior se le llama derivada de en el punto y se denota por . También se dice que es derivable en . La recta tangente a la curva en el punto tendrá pues la siguiente ecuación:
Por ejemplo, si queremos hallar la recta tangente a la curva en el punto , hemos de aplicar la ecuación anterior. En este caso . Ahora calculamos la derivada en :
Por tanto la recta tangente es:
En la siguiente representación con desmos se aprecia con claridad.
De entre todas las rectas que pasan por el punto la recta tangente es la que mejor aproxima a la función en las proximidades de dicho punto, en el sentido de que, si es derivable en y llamamos , entonces es la única función que verifica
Vamos a formalizar la idea anterior. Las aplicaciones de la forma
en que y son números reales fijos, se suelen llamar funciones afines de en (obsérvese que las funciones afines son aquellas cuya representación gráfica es una línea recta).
Proposición.
Sea una función real de variable real y . Las siguientes afirmaciones son equivalentes:
i) es derivable en el punto .
ii) es continua en el punto y existe una función afín tal que:
En caso de que se cumplan i) y ii) la función viene dada por
y como consecuencia es única.
Cálculo de una Derivada
En resumen:
¤ “La derivada de una función constante es cero”
Ejemplos:
a) Si
b) Si
c) Si
d) Si
e) Si
Derivada de la función identidad
Ya hemos deducido antes que
¤ “La derivada de x es 1”
Derivada del producto de una constante por una función
En resumen:
¤ “La derivada de una constante multiplicada por una función es igual a la constante multiplicada por la derivada de la función”
De momento tan sólo conocemos las funciones derivadas de la función cuadrado, la función identidad y la función raíz cuadrada, por lo que los ejemplos que ahora pondremos habrán de basarse en dichas funciones. Naturalmente, a medida que “progresemos” en el aprendizaje de las funciones derivadas, los nuevos ejemplos irán ampliándose a los nuevos conocimientos adquiridos.
Ejemplos:
a) Si
b) Si
c) Si
Al llegar a este apartado podemos ya abordar dos “cuestiones” que habían quedado pendientes con anterioridad, debido a que nos faltaban todavía “herramientas” para su resolución.
Se trata, por una parte, del cálculo de derivadas laterales; y, por otra parte, de comprobar que “continuidad no implica derivabilidad”.
Tomemos la función valor absoluto de x, .
Por definición de valor absoluto de un número real, esta función puede escribirse como una función “definida a trozos”, de la siguiente manera:
Por tanto, si queremos hallar su derivada en el punto nos vemos obligados a estudiar sus derivadas por la izquierda y por la derecha:
Estamos, pues, ante una función que en el punto tiene derivadas laterales distintas. En consecuencia, no es derivable en dicho punto. Y sin embargo es continua en él, como puedes intuir viendo su gráfica, que es
Se trata, pues, de uno de los contraejemplos, que antes habíamos anunciado, que prueban que no es cierto el recíproco del teorema: “Si una función es derivable en un punto, entonces es continua en dicho punto”.
Por otro lado, ese punto , en el que no es derivable, es un “punto anguloso” de los que hemos mencionado antes, en el que la gráfica no tendrá tangente, sino semitangentes por la izquierda y por la derecha cuyas ecuaciones vamos a hallar, teniendo en cuenta que el punto es el :
Semitangente por la izquierda:
Semitangente por la derecha:
lo cual, por otro lado, resulta evidente observando la gráfica.
Derivada de una suma de funciones
=
En resumen:
0 comentarios: